Soy una persona muy friolera, no puedo evitarlo.
Y la gente no me entiende cuando digo que paso más frío en primavera que en invierno.
En los meses anteriores las calefacciones mantienen las casas a una temperatura ideal. En la aldea se enciende el fuego, con ese calorcito tan agradable; pero en primavera se apagan las fuentes de calor aunque el ambiente a la sombra siga siendo bastante fresco. Esto es horrible cuando pasas algún tiempo quieto dentro del hogar (en el ordenador, por ejemplo) Es otra de las cosas que me resultan odiosas de la primavera, ese "sí pero no".
Echo de menos el fuego en la chimenea, aunque entiendo que hay que racionar la leña. Como dicen en el pueblo "la leña calienta dos veces: cuando se corta y se prepara y cuando se quema". Y es cierto, porque el trabajo es bastante duro... pero mirad lo que me he encontrado en la medera recién apilada ¿lo veis?es el corazón del invierno que esperará hasta el año que viene...
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